Qiibeando en Netflix: Dear Zachary

Gracias a la ola de popularidad que está arrasando al genero “documental detectivesco” (o sea Making a Murderer), Netflix nos da la oportunidad de explorar otros títulos menos conocidos, pero no por eso menos emocionales o interesantes. Así fue que me encontré con Dear Zachary: A Letter to a Son About His Father por Kurt Kuenne.

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Este documental recoge entrevistas, fotos y anécdotas de quien en vida fuera el mejor amigo de Kuanne, Andrew Bagby, asesinado por su ex-novia, Shirley Turner, en el 2001. Kurt comienza el proyecto en medio del proceso de enjuiciamiento y extradición de Turner por lo que las memorias y entrevistas con amigos y familiares de Andrew constantemente reflejan las emociones en tiempo real de lo que están viviendo. Esta característica hace de este documental uno diferente porque vives ahí con los padres de Andrew y sus amigos todas las incidencias del caso sean buenas o malas.

Lo único que está en pasado es la muerte de Andrew, pero luego de ese relato, todo pasa en “tiempo real” incluyendo lo que le da título y cambia el propósito del documental. Luego de huir a Canada y en espera de extradición, Turner anuncia que está embarazada de Bagby y cuando el niño nace le pone Zachary. Ahí Duanne decide que este será un documental especial para que Zachary conozca quién era su padre y cuánto lo querían.

Kuenne logra un hermoso homenaje a Andrew y su legado en un documental que tiene tantas vueltas como cualquier programa de investigación. En lo que se diferencia Dear Zachary de los Making a Murderer de la vida es que aquí no hay un crimen que resolver de parte del público. Esto es un homenaje, no un crimen sin esclarecer. Kurt presenta desde un principio claramente quién es la culpable y que esta es su recolección de los hechos y la vida de su mejor amigo.

Dear Zachary es uno de esos documentales que podrás discutir con amigos, pero desde un ángulo completamente distinto. No hay mil episodios para devorar, pero créeme que con uno solo basta. Es impactante y hasta cierto punto drenante, al menos para mí lo fue.

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Cinematográficamente Dear Zachary parece un homemade movie. Leyendo más del caso me enteré que en inicio el documental no estaba hecho para compartir con el público sino con los amigos y familiares, pero que dado las situaciones que sucedieron con el caso, decidió entonces publicarlo.

Les recomiendo que vean Dear Zachary porque es ante todo una celebración de vida sobre alguien memorable y porque como historia criminal se quedará con ustedes por mucho tiempo.