Crítica: Barbie lo puede hacer todo

No necesito ser yo quien te diga que casi todas las series animadas que recordamos de los 80’s y 90’s eran básicamente comerciales extendidos para vender juguetes. Ustedes saben eso, al igual que sabemos que toda adaptación moderna se hace con parecida intención; mas figuras de robots transformándose, superhéroes por un tubo y siete llaves, y todo lo posible que se pueda vender como “figura de acción” o, mejor dicho, “coleccionable” para los que somos niños grandes. Pero entonces llega Barbie. Y Barbie puede hacer eso, sin necesariamente querer hacerlo, porque Barbie puede hacerlo todo.

La directora Greta Gerwig, que también coescribió el guion junto a su compañero habitual Noah Baumbach, convierte lo que pudo ser otro simple comercial glorificado en una subversiva, radical y existencialista sátira que no pide perdón por lo que dice ni lo que quiere ser, con filoso humor y magnifico elenco dándolo todo.

Greta sabe exactamente lo que esperábamos de una película de Barbie, y logra virar todo patas arribas en una historia que igualmente celebra el legado de la muñeca y reconoce las críticas, sin quitarle valor a ninguno de los dos puntos de vista, envuelto en una explosión de rosa, música, baile, y humor auto-consciente que me tuvo riéndome de principio a fin, con algunos momentos humedeciendo los ojos, pero siempre con una sonrisa en los labios.

En Barbieland, la Barbie estereotipo (Margott Robbie) vive el mejor día de su vida todos los días, junto a todas las Barbies, desde la Presidente, la policía, la cartera, la trabajadora de construcción, y la Barbie ganadora del Premio Nobel entre muchas más. Todas las tardes hay fiesta con baile, terminando en una noche de chicas. Por su lado, los Ken solo viven cuando las Barbie los miran, incluyendo a “Ken de Playa” (Ryan Gosling, en su mejor trabajo de comedia desde The Nice Guys), quien vive pendiente que Barbie estereotipo lo quiera como el a ella.

Pero cosas están pasando; el agua imaginaria sale fría de la ducha, la leche imaginaria esta expirada y -¡HORROR!- sus pies ya no son arqueados, sino que su talón está tocando el piso. Cuando le pide a ayuda a la “Barbie extraña” (Kate McKinnon), Barbie descubre que debe viajar al mundo real y arreglar el problema, para volver a ser perfecta en su vida perfecta.

Y es ahí donde Greta aprieta el gatillo; con una trama sobre el significado de Barbie como icono feminista pero simultáneamente como objeto de burla y hasta culpada de establecer inalcanzables estándares. Gerwig sabe exactamente a quien le quiere hablar y lo que quiere decir, incluyendo algunos zarpazos hacia las corporaciones detrás de la película, pero especialmente a quienes crecieron jugando con Barbie, y todavía mejor cuando Ken de Playa descubre lo que significa ser hombre en el mundo real.

Con el arco de Ken de Playa, Gerwig aplica una ingeniosa observación a la manipulación cultural de ideas para adelantar agendas. Claro, Greta tiene su propia agenda, pero al menos es clara y directa sin aspavientos ni disimulo, pretendiendo otra cosa.

Margot Robbie es encantadora como Barbie estereotipo, usando cada milímetro de su cara –con algunos momentos de humor corporal- para demostrar todas las emociones a través de su aventura, desde enfrentar los primeros retos, hasta descubrir lo que el mundo piensa de ella. Al mismo tiempo, Ryan Gosling destaca nuevamente cuan bueno es haciendo comedia. Aunque su Ken no supera el trabajo que hizo en la tremenda The Nice Guys (en serio, vean esa película), queda bastante cerca, especialmente cuando tiene la oportunidad de pasar por varios alocados momentos y cambios de personalidad, incluyendo secuencias musicales.

Con ellos hay un espectacular elenco de apoyo, destacando la siempre excelente America Ferrera como Gloria, una trabajadora en Matell que decide ayudar a Barbie, junto a su hija Sasha (Ariana Greenblatt), quien desprecia todo lo que Barbie representa en la vida real.

En manos menos geniales, Barbie hubiera sido una mirada cínica a la marca, o una completa declaración de amor. Greta logra ambas y mucho más, con una divertida historia recordándonos que varias cosas pueden ser ciertas, diferentes visiones pueden ser validas cuando salen del corazón, y que encontrarse a uno mismo puede ser el mejor logro. ¡INMENSAMENTE RECOMENDADA!

El George

Podcastero, comediante, crítico de cine y TV miembro de la Critics Choice Association, crítico certificado en Rotten Tomatoes, y padre de gatos. Una vez cuando niño entré a un cine, y en cierta forma nunca salí.