La Política del Plagio

Al fin, tras la convención del partido de ayer, parece que “finalmente” los mandamás del partido PNP se han decidido a explicar al pueblo lo que yo les llevo diciendo durante los últimos 30 años.

Palabra por palabra Romero Barceló ha propuesto las ideas que yo he compartido con el pueblo a través de diferentes medios, día tras día durante los últimos 25 años. Sinceramente, idea suya o mía, me produce una inmensa alegría que por fin se haya dado cuenta del problema de las grandes corporaciones y de que el objetivo final es la estadidad. Tras una larga carrera política cubriendo todos los puestos habidos y por haber, parece ser que por fin ha visto la luz. Espero que también haya tomado nota de los pasos a seguir para alcanzarlo, y no se limite a repetir hasta la saciedad ante las multitudes enfervorizadas el grito de estadidad.

Porque mientras Romero Barceló critica a los Estados Unidos por aplicar prácticas dilatorias en lo referido al proceso de admisión como estado de Puerto Rico, propone sin esconderse, un plebiscito para dentro —nada más y nada menos— que 2 años (?), supuestamente durante las elecciones a la gobernación, presumiendo que el PNP va a ganarlas. Exactamente lo que sucedió la última vez. Esto supone el uso político de un proyecto para beneficios personales y no para Puerto Rico, al que se pone siempre como prioridad en los discursos y asambleas, pero que queda relegado una vez que se ganan las elecciones.

A gritos y por aclamación, entre música estridentes y aplausos enlatados, se aprueban resoluciones que llaman a revoluciones de boca nada mas, pero que en realidad solo revolucionan a los asistentes por un rato, ya que no proporcionan ninguna nueva opción y lo que es peor ninguna acción. Escuchando la asamblea perdí la cuenta de las veces que se mencionaba la palabra “estadidad”, reduciendo su significado a un simple grito para exaltación de las multitudes. Estadidad, no es una palabra que se pueda prostituir ni en una asamblea ni en una campaña.

La Estadidad no llega por más que la gritemos ante dos mil personas con el objeto de obtener votos o salvaguardar intereses personales. La Estadidad es un proceso que requiere una serie de acciones que han de ser tomadas cuanto antes y que no puede ser utilizada para obtener réditos políticos individuales.

Y la impresión que da es que sus propios defensores están intentando evitar que llegue para poder continuar ofreciéndola año tras año. La política en Puerto Rico se ha convertido en un plagio, y sus políticos, carentes de originalidad y de ideas, copian algo que ya se deberían saber de memoria. Esperemos que al menos copien bien, y pasen el examen.

Escrito por: Miriam Ramírez (@mjean2)

[adrotate banner=”1″]