Columna: Andando la calle sola aprendí

No conocí a Ivania Zayas, pero sí he escuchado toda mi vida el discurso del Teniente Bauzó y lo peor es que a veces me lo he creído. Aún el otro día me encontré diciéndole a mi novio “es que no entiendes, es diferente porque soy mujer”. Es una vergüenza que en esta era todavía tenga que utilizar esa línea como justificación a cualquier cosa, pero peor aún que hayan acciones que me hagan utilizarla.

La soledad me viene de nacimiento. Soy hija única y aunque disfruto de la compañía del mundo, aprendí desde niña a vivir con mi mente y pensamientos, a hacer cosas sin compañía, a aventurarme porque puedo, tengo el tiempo y me nace de lo más profundo de mis ovarios. Por ello, me he encontrado con situaciones incómodas en las que he tenido que reaccionar justificando mi derecho a ocupar espacio en este mundo. Por ejemplo: Al caballero de aduana que me preguntó un día “¿Por qué viajas sola?” Mi respuesta: Pues porque puedo. Al tipo que me detuvo en la Ashford y me preguntó a plena luz del día  “Mamih, vente vamoh a chichar”Le grité NO. Al troglodita de 300 lbs Marine, que entendía que porque yo estaba pasando podía darme una nalgada y su reacción de “no puedes hacerme nada” Vete al carajo. ¿Por qué no avergüenzan públicamente a todos estos hombres? ¿Por qué la culpa cae sobre mí si yo solo estoy caminando sola? Teniente Bauzó, ¿no le parece interesante que la falta de respeto y el machismo suceden también a plena luz del día? ¿Eso no se debe investigar?

Andando sola en la calle aprendí a no tenerle miedo a mis pasos ni al mundo. Aprendí a explorar y encontré en las calles de Barranco expresiones de arte hermosas. Aprendí a defenderme de situaciones como las anteriores. Andando sola en la calle superé abusos y maldeamores, andando sola se me han ocurrido las mejores ideas. Ando sola porque es un escape al ruido del mundo, un tiempo para centrarme. Lo siento esencial para mí no importa la hora que sea, siempre encuentro tiempo para andar sola.

| Columna relacionada: ¿No les cansa?

Más allá que la perspectiva de género, lo que necesitamos es educación y punto. ¡RESPETO A LOS SERES HUMANOS! Según lo que he leído, Ivania era luchadora de los derechos de la mujer, que su muerte por más triste que sea, deje el legado del cambio que tanto deseó en vida y que nos merecemos si queremos superarnos como personas.

[adrotate banner=”1″]

Aimee

Fanática del cine, fashion y Real Madrid. Amiga de merengues y 2 o 3 culés que se han colado. Se ríe bien duro, ha ganado múltiples galardones en Rock Band, odia hablar de ella en tercera persona y hacer biografías.