Como ocurre con todos los géneros, en el horror las mejores historias también son aquellas usando la trama como metáfora de alguna situación afectando la humanidad, o sus emociones. Uno de los expertos en eso es Stephen King, que, continuando el renacimiento de sus trabajos llevados al cine, escribió el cuento corto en que se basa The Boogeyman, nuevo estreno de 20th Century Studios.
Quien mejor lo sabe ahora mismo que Mike Flanagan, uno de los maestros modernos del terror psicológico, responsables de joyas como The Haunting of Hill House, y Midnight Mass, entre otras. Aparentemente Rob Savage, director de The Boogeyman, también admira los trabajos de Flanagan, pues este filme se siente como hecho tratando de copiar su estilo, solamente logrando que uno entienda cuan bueno es Flanagan, nada fácil de imitar.
Afortunadamente lo hace suficientemente bien para que The Boogeyman sea un buen rato en el cine, con bastantes brincos, sustos y tensión para satisfacer apetito regular de horror. Una película de esas buenas para ver en grupos y burlarse del que saltó más alto del asiento.
Cuando Lester Billings (David Dastmalchian) es acusado de asesinar sus propios hijos, el psicólogo Will Harper (Chris Messina) tiene que determinar si Lester está capacitado mentalmente para enfrentar los cargos. Lester asegura que la tragedia no fue su responsabilidad. Mientras tanto, Will lidia con su propia perdida luego de la muerte de su esposa, quedándose con sus hijas Sadie (Sophie Thatcher) y Sawyer (Vivien Lyra Blair).
Pasa poco tiempo antes que la casa Harper comience a tener sus propios momentos misteriosos, afectando mayormente las niñas, quienes tendrán que enfrentar la amenaza sobrenatural, ante la incapacidad emocional de Will de asistirlas tanto con el duelo, como con las sospechas de un ente espectral.
Savage utiliza varios elementos para mantener la tensión, desde jugar con las sombras y la luz, una inquietante banda sonora y buenos trabajos del elenco. Al igual que flanagan, Savage te mantiene en un constante suspenso de “¿viste eso?”, o “¿algo se movió ahí?”, usando la criatura esporádicamente, para que no puedas adivinar si ahora es que es o estas imaginando cosas.
The Boogeyman no trae nada que no hayamos visto antes, pero lo que hay se usa bien para cumplir los requerimientos necesarios de pasar un rato asustado en una sala oscura con extraños.
Podcastero, comediante, crítico de cine y TV miembro de la Critics Choice Association, crítico certificado en Rotten Tomatoes, y padre de gatos. Una vez cuando niño entré a un cine, y en cierta forma nunca salí.
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