Aaron Swartz se encontraba trabajando en un proyecto antes de su inesperada muerte. SecureDrop es el nombre oficial que recibe este proyecto luego de ser terminado por la Freedom of the Press Foundation y liberado al público.
The New Yorker lleva desde mayo de este año utilizando SecureDrop, siendo el primero en implementarlo bajo el nombre de StrongBox. Ahora, otros medios pueden utilizar este sistema que fue terminado por el especialista James Dolan, quien fue contratado por Freedom of the Press Foundation y Kevin Poulsen, quien comenzó en el proyecto original junto a Swartz.
SecureDrop está basado en código abierto y puede ser descargado y modificado a conveniencia. El sistema, según la propia Freedom of the Press Foundation, no es 100% seguro, no obstante, indican que es la forma más segura de comunicarse anónimamente. El sistema funciona asignando un código único a cada fuente para de esta forma establecer una conexión entre estos y los medios que adopten el mismo sin tener que ser identificados.
Con SecureDrop, muchos podrán sentirse más seguro de revelar información a los medios informativos.
| Los interesados en conocer más sobre el código de SecureDrop pueden visitar su repositorio en GitHub.
Vía: WashingtonPost
[adrotate banner=”1″]
Founder & Commander-in-Chiief de QiiBO.com. Tras más de una década como publicista decidí seguir mi propio camino profesional. Ahora sigo el consejo de un genio, hago el trabajo que me gusta.
1 Comment
La muerte de Schwartz, para otros fue inesperada, pero para el fue esperada: un suicidio.