La trilogía Bourne es una de las franquicias más sólidas que han habido en el género de espionaje en los tiempos actuales. El escritor y ahora director de la nueva cinta The Bourne Legacy, Tony Gilroy, aceptó el reto de realizar una cinta que diera continuación con un nuevo personaje a aquella magnífica trilogía, que fue dirigida en primer lugar por Doug Liman y luego por Paul Greengrass.
El actor Jeremy Renner tenía unos zapatos muy grandes que llenar, ya que el actor Matt Damon fue quien hizo que estas cintas fueran un éxito y mantuvo un personaje consistente. La trilogía Bourne se caracterizaba por sus espectaculares secuencias de acción y cómo lograban mantener al espectador en tensión de principio a fin. The Bourne Legacy cuenta con buenos talentos, Renner es un actor capaz de hacer el papel que esperábamos y acompañado por la talentosa Rachel Weisz, ambos mostraron una química entre ellos, algo que considero fue uno de los mayores atractivos de esta cinta.
Jeremy Renner interpreta a “Aaron Cross”, un ex-militar que es reclutado para participar en “Outcome”, un programa especial de agentes ‘black-ops”. Luego de que “Jason Bourne” diera a conocer la existencia de otros proyectos secretos como “Blackbriar” y “Treadstone”, el gobierno se da a la tarea de eliminar el proyecto “Outcome”, con toda la evidencia posible, incluyendo los participantes del proyecto. “Cross” debe sobrevivir a toda costa ya que está siendo asechado y aparte de eso su ración de medicamentos se le están acabando. Los agentes de “Outcome” deben tomar dos medicamentos diariamente para mantenerse en condiciones óptimas, tanto física como mentalmente, es ahí cuando “Cross” llega donde la “Dra. Marta Shearing” interpretada por Rachel Weisz.
Es inevitable el querer comparar esta cinta con las anteriores y si me permiten, The Bourne Legacy no es una cinta que logre estar a la altura de éstas. Como muletilla se utiliza el nombre de Jason Bourne en múltiples ocasiones, a modo excesivo, como queriendo asegurarle al espectador que está viendo una película que de una forma u otra se relaciona con la trilogía Bourne.
La trama de The Bourne Legacy, carece de mucha más acción, y a mi entender no sacaron provecho de que Jeremy Renner podía ser tremenda figura para reemplazar a Matt Damon en su papel de “Jason Bourne”. The Bourne Legacy cuenta sólo con tres secuencias de acción donde vemos a Renner enfrentándose a sus rivales y aunque son peleas que mantienen al espectador atento, no sobrepasan lo que ya habíamos visto en el pasado. De igual forma carecen de un rol antagónico sólido, ya que cuando creemos tener uno para el que nos están preparando con la idea de que es una gran amenaza, de buenas a primeras se queda corto por mucho.
Dentro de toda la historia, a pesar de las fallas, sentí que había una historia que pudo haber sido desarrollada mejor manera. La premisa es una que tenía mucho potencial para ser igual o mejor que las anteriores y eso es algo que Gilroy ha sabido hacer en el pasado. Aparte de Renner y Weisz, también participan actores como Edward Norton y otros actores que habíamos visto en las pasadas cintas como David Strathairn y Scott Glen, aunque su participación es mínima ya que prácticamente en todo momento estamos con los personajes de “Cross” y “Shearing”.
En un principio la película se siente lenta y hasta un poco aburrida. Partiendo de que vamos a ver algo relacionado con la trilogía Bourne, lo normal es que vayamos con la idea de que vamos a ver una película de acción. Habiendo estado involucrado Tony Gilroy, desde un principio como guionista y ahora como director de esta nueva entrega, es una pena que no haya logrado presentarnos una película que lograra mantener ese “feeling” de “overdrive”. Gilroy recurre muchos a los “flashbacks” para profundizar en la historia y dado el caso que este agente no padece de amnesia no me parece un buen método para que nos presente su historia. Al igual que algunas líneas en las que algunos personajes intentan ser algo “graciosos”, están completamente fuera de lugar y quedan como un chiste de mal gusto, del que nadie se ríe.
The Bourne Legacy es una película de espionaje que nos lleva nuevamente a conocer un nuevo agente, en circunstancias que aunque no son muy similares a las de “Jason Bourne” pretenden hacernos creer que una historia se asimila a la otra. Si ponemos a luchar en un mano a mano a “Bourne” y a “Cross” no hay duda que Bourne saldría victorioso una vez más, lo mismo pasaría con estas cintas. The Bourne Legacy no cuenta con una historia muy compleja, aún así nos deja con la certeza de que veremos más de esta película en el futuro. Posiblemente tienen en mente presentarnos una nueva trilogía. ¿Igual de buena que la trilogía anterior? El tiempo dirá, aunque ya empezaron mal.
Desde muy niña descubrí que el cine sería una de mis más grandes pasiones y aspiro a transmitir la misma pasión a cada testigo de mis escritos. Amante del cine en toda su gloria y traiciones. Siempre busco esa obra que logre evocar grandes emociones, ya sea a través de su dirección, su historia o sus actuaciones. Cuando estas últimas se alinean en armonía todo se vuelve magia y la espera habrá valido la pena.
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yo la vi, me parecio muy buena. pero Damon y greengrass la hubieran hecho mejor.