El cine puertorriqueño continúa demostrando su capacidad para tirar con todo, con menos que otros, gracias a una dura voluntad de divertirnos y contar historias. La comedia es uno de nuestros géneros favoritos, y Los Mecánicos 2 llega para satisfacer esas ganas, con una oferta liviana, divertida, pero potente emoción en la carretera.
Me reí muchísimo viendo Los Mecánicos 2 y, aunque no se mucho (realmente nada) de carros y mecánica, disfruté las escenas de carreras gracias a una excelente cinematografía y la habilidad del director Julio Romano sacando el máximo a las secuencias de velocidad y un diseño de sonido que la hace más que merecedora de ser la primera película del patio presentándose en salas de cXc.
Fue un alivio que me gustara porque, siempre es bien incomodo salir de una sala para ver las caras sonrientes de actores, productores, técnicos y otra gente esperando las reacciones, y uno tener que tirarse el “sí, esto fue una película. Con diálogos, luces y personas”. En este caso salí contento, mayormente gracias a la dinámica entre personajes, empujado por el carisma del elenco, especialmente el grupo de amigos principal, aparte de las ya mencionadas escenas de acción motorizada.
Luego de salvar el taller de mecánica “No Hay Liga” en la primera película, Linda (Gredmarie Colon) y Luis (Osvaldo Friger) lidian con la vida real de mantener un negocio, una relación y la nueva aventura de ser padres. El balance de por si va delicado, cuando aparece Victoria (Ana Isabelle), una allegada hija ilegitima de Don Luis, el padre de Linda que le dejó el taller, a reclamar su “herencia robada” junto a César (Marco Pérez), exnovio de Linda. Entre una cosa y la otra, Luis y Linda deciden unirse a un exclusivo circuito de carreras internacional, donde apostarán todo contra Victoria.
La trama es mas bien una excusa para dejar que los personajes jueguen entre sí, pues la urgencia de la situación obliga traer más gente al taller, propiciando constantes encontronazos entre los distintos equipos, definitivamente lo mejor del filme, adicional a las secuencias de batallas automovilísticas.
Los Mecánicos 2 es una entretenida opción para toda la familia, que no se toma nunca demasiado en serio, con buen humor, fácil de consumir, y simple desarrollo, excepto cuando llega el momento de acelerar motores, para demostrar que no tiene mucho que envidiar a producciones de afuera. Velozmente recomendada.
Podcastero, comediante, crítico de cine y TV miembro de la Critics Choice Association, crítico certificado en Rotten Tomatoes, y padre de gatos. Una vez cuando niño entré a un cine, y en cierta forma nunca salí.
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