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Crítica: Evil Dead Rise llega sin misericordia

Si le preguntas a gente de mi edad cual fue la primera película de horror que los traumó, probablemente contesten “El Exorcista” y, aunque la cabeza giratoria de Linda Blair también me dejó sin dormir, no es mi respuesta. Mi contestación es The Evil Dead. Gracias, mami, por ser tan irresponsable de dejarme ver esta película a los 9 años con mis primos. Me aflojó tanto el esfínter, que no la volví a ver hasta los 16 años. De día. Rodeado de amigos.

En 1981, Bruce Cambell y Sam Raimi, amigos de niñez, se juntaron con Robert Tapert, excompañero universitario de Raimi, para filmar una película de horror de bajo presupuesto (unos $375,000) que terminó recaudando sobre $29 millones de dólares y, aunque no inventó el sub-genero de “cabaña en el bosque”, definitivamente cimentó varias de sus características.

Dos secuelas, una serie con tres temporadas, un “reboot” y hasta un videojuego después, volvemos al mundo de la muerte malvada con algunas diferencias: Bruce Campbell no protagoniza como Ash, Raimi no dirige –aunque ambos funcionan como productores- y el humor ha sido reducido casi completamente, aunque tiene su propio estilo.

¡Me encantó! Hacía tiempo no salía tan agitado de una película de horror; Evil Dead Rise triunfa respetando la mitología de la franquicia, dándole nuevos giros, combinando horror corporal, sobrenatural y psicológico en una escalofriante experiencia. Es violenta, brutal, visceral, sin misericordia, recordándome porque amo tanto este género.

El primer cambio es la localidad; en vez de algún bosque perdido en las sínsoras del carajo, Evil Dead Rise ocurre en el piso más alto de un edificio casi cayéndose en cantos, a punto de ser desalojado. En uno de los pocos apartamentos que vive gente, Ellie (Alyssa Sutherland) vive con sus tres hijos, dos adolescentes, chico y chica, y una niña pequeña. La burra pare cuando visita Beth (Lily Sullivan), hermana menor de Ellie, escogiendo el peor fin de semana posible para hacerlo, porque justo Caleb (Richard Crouchley) el hijo mayor de Ellie, encuentra un misterioso libro con dos discos de vinil, que decide tocar en su equipo de DJ. ¿Ustedes ven porque no quiero tener hijos?

El resto lo saben: uno de los discos contiene los encantamientos para activar el libro, uno de los volúmenes del “Necronomicon” o “libro de los muertos”, soltando espíritus chocarreros que comienzan posesiones en la familia.

Lee Cronin escribe y dirige un dinámico guion desperdiciando nada, consiguiendo una perfecta duración de hora y media. Una vez empieza el terror, no detiene hasta literalmente la última escena, con un violento segundo y sangriento tercer acto repletos de sustos, pedazos humanos volando, y desgarres inhumanos.

Si algo bueno surgió de la controvertida combinación de Warner Discovery, es que Evil Dead Rise fue rescatada de estrenar exclusivamente en HBO Max, llevándola a las salas de cine donde pertenece. Irónicamente, el bajo presupuesto de su destinación original añade a su encanto, manteniendo el ADN de la franquicia, con una perfecta experiencia para disfrutarse en grupo, y gritar juntos, ¡Inmensamente recomendada!

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