Floyd Mayweather y Manny Pacquiao aceptaron seguir los protocolos de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por sus siglas en inglés) para la pelea que disputarán en mayo.
Los controles antidopaje fueron el elemento que frustró las negociaciones en 2010, cuando los boxeadores trataron de pactar un combate.
Como parte del acuerdo, la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) podrá tomar muestras de sangre y orina de ambos boxeadores a partir de ahora hasta el día de la pelea, el 2 de mayo en Las Vegas. También tendrán que someterse a controles tras el pleito.
Las muestras serán enviadas a laboratorios que pueden efectuar análisis para detectar hormona de crecimiento humano, EPO y cualquier otra sustancia que aparezca en la lista de productos prohibidos por la WADA.
Travis Tygar, director ejecutivo de la USADA, dijo que al aceptar el acuerdo, los boxeadores enviaban “un mensaje fuerte sobre la importancia de una competencia limpia y segura”.
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