En el mundo del fútbol hay ciertos honores que solo se reservan para los jugadores que, más allá de haber ganado algún campeonato o haber sido hombre de un solo club, han trascendido. Trascendido la barrera de los colores de la camiseta o la nación a la que representa. Uno de estos honores es que el mundo te conozca por un solo nombre. El poder mencionarse en la misma oración que Pelé, Maradona, Cruyff o Zidane está entre los elogios más grandes que un futbolista pueda recibir. El señor Xavier Hernandez, Xavi, hoy en día, el jugador más laureado del futbol español está, sin duda ni ofensa alguna, está en esa lista privilegiada de conocerse por solo su nombre.
El “Motorcito” nació en Terrassa, Barcelona un 25 de enero de 1980. A sus 11 años se convirtió en canterano de La Masía, donde por primera vez lució el azul y grana del FC Barcelona.
“Si se va al Milan me divorcio”
Desde muy joven, Xavi comenzaba a llamar la atención del fútbol europeo. Comandaba el campo con su visión y excelentes pases, tanto así que ya para el 1998 comenzaba a hacer apariciones en el primer equipo. Aun así, su camino a la grandeza no fue recto y a pasos agigantados. El primer equipo del Barça tenía en el centro del campo a un tal Josep Guardiola, capitán y cerebro de aquel Barcelona. Conseguir minutos en el primer equipo no era tarea fácil, pues le tocaba suplir a uno de los mejores centrocampistas de la historia de la entidad catalana. Por eso, en el otoño del ’99 luego de que Xavi llegara de ganar el mundial sub-20 en Nigeria, el vice-presidente y director ejecutivo del AC Milan, le ofreció el saldo de 150 millones de pesetas españolas (~900,000 euros) anuales a Xavi para que firmara por el conjunto italiano. Fue en ese entonces donde Merce, la madre de Xavi, le reprochó a Joaquin (su padre y representante) con esas palabras que hoy día son famosas entre los Culé; “Si se va al Milan me divorcio”.
Su golpe de suerte llegó en la temporada 1999-2000, cuando por una lesión de gravedad del propio Pep Guardiola, Xavi se adueñó de su puesto y un poco más tarde, de su banda de capitán. El próximo año, Pep dejaría el Barça por el Brescia italiano, y Xavi se establecería como el motor del equipo que unos años más tarde se conocería como el mejor equipo de la historia.
El resto… el resto es historia… Xavi ha perdurado cambios de técnicos, cambios de presidentes, la partida de varios de sus más importantes compañeros y mejores amigos, todo mientras sigue siendo el ancla que mantiene al buque llamado Barça estable, incluso en medio de las peores tormentas.
Habiendo ganado casi todo lo posible, algunos trofeos varias veces, hoy en día Xavi es, no solo, el jugador español mejor laureado en la historia, sino también un símbolo de perseverancia, superación y los valores que representan el formarse toda una vida en can Barça. Entre sus palmarés están:
Con el Barcelona:
- 8 campeonatos de La Liga
- 2 Copas del Rey (con la posibilidad de añadir una tercera)
- 6 Supercopas españolas
- 3 Ligas de Campeones de la UEFA (con la posibilidad de añadir una cuarta)
- 2 Supercopas de la UEFA
- 2 Mundialitos de Clubes
Con España:
- 1 Mundial
- 2 Campeonatos Europeos
- 1 plata olímpica
- 1 segundo lugar de Copa Confederaciones
- 1 Mundial Sub-20
A nivel personal:
- 1 premio al jugador del año de la revista World Soccer
- 1 premio al mejor jugador del Campeonato Europeo (2008)
- 1 segundo lugar al mejor jugador europeo
- 4 terceros lugares en el podio del Balon de Oro
- 1 MVP (MotM) de la final del Campeonato de la UEFA
- 1 premio al centrocampista del año
- 4 veces premio al mejor creador de juego del mundo
- 1 premio al jugador revelación del año de La Liga
- 1 premio al mejor jugador español
- 2 podios en el Trofeo Di Stefano
- 3 premios al mejor centrocampista de La Liga
- 1 inclusión al mejor XI de la Copa Mundial (2010)
- 2 inclusiones al mejor XI del Campeonato Europeo (2008,2012)
- 6 veces incluido al mejor XI del mundo (2008-2013)
- 5 veces incluido al mejor XI de la UEFA (2008-2012)
- 3 veces incluido al mejor XI de la asociación de revistas ESM
- 1 balón de plata del Mundialito de Clubes
- 1 balón de bronce del Mundialito de Clubes
Pero esto no es una biografía. Esto es una carta de despedida de un hincha a uno de sus ídolos. Se nos va uno de los más grandes. Intento siempre mantener parcialidad, objetividad y de mantener mi persona fuera de lo que escribo. Francamente, en esta ocasión se me es imposible.
Gracias Xavi. Gracias por darle tanto al barcelonismo, al fútbol y a los Culés. Gracias por tanto fútbol, por tanta gracia, por tanta maestría. Gracias, Xavi por ser el maestro, no de una, sino de dos de las mejores orquestas que han cautivado los ojos de la Tierra. ‘Dame un balón y moveré el mundo”, una vez dijiste, y mejores palabras jamás pudieron salir de un hombre que maravilló tanto con un balón a sus pies. Gracias por dejar el alma por tu camiseta. Gracias por sudarla, por llevarla con orgullo siempre, gracias por amarla. Gracias por enamorarnos teniendo tanta gracia evadiendo rivales y habilitando compañeros. Por tu visión, tu pase, y tu inteligencia.
Gracias también por saber y hacernos entender que existen rivalidades en el fútbol pero jamás enemistades. Gracias por trascender barreras.
Ahora te despides, y el barcelonismo no tiene nada que reprocharte. Al tiempo sí, por hacerte envejecer y poco a poco intentar quitarte esa chispa. Sales por la puerta ancha, en el momento preciso y luciendo como el héroe que eres. Te adaptaste a los tiempos, a los técnicos, y a los roles; siempre poniendo el bien del equipo antes que el tuyo. El escalón más alto del fútbol pierde a una de sus piezas más importantes, pues como tú muy bien dijiste, te queda mucho, solo que no a ese nivel.
Solo nos queda pedirte una cosa, Xavi, que cumplas tu promesa de que hoy te vas, pero es para volver. Tú no eres del Barça, tú eres EL BARÇA, y el Barça eres tú, y el Barça sin ti jamás será lo mismo.
[adrotate banner=”1″]
Comments are closed here.