Al igual que mother!, de Darren Aronofsky, Three Billboards Outside Ebbing, Missouri es un clásico ejemplo de un filme que termina siendo algo totalmente diferente a lo que la promoción te vende. Con la de Aronofsky, los tráilers vendían un típico filme de horror que toma lugar en una casa que, quizás, está embrujada. En Three Billboards, los tráilers venden una película de una mujer que está tratando de conseguir justicia para su hija, haciendo que todo el pueblo mueva cielo y mar para encontrar el asesino (o al menos eso fue lo que pensé cuando lo ví). Y aunque técnicamente de esto trata el filme, Martin McDonagh esconde más detrás del character study (estudio de personaje) que es Three Billboards.
Como mencioné, Three Billboards Outside Ebbing, Missouri, cuenta la historia de Mildred Hayes, madre de Angela Hayes, quien fue carcinada y violada por alguien cuya identidad, meses después del crimen, sigue siendo un misterio. Esto es lo que lleva a Mildred a rentar tres billboards, en los que, básicamente, escribe un mensaje diciendole al sheriff de la ciudad que tome acción, y encuentre al culpable detrás del horrendo crimen cometido. De ahí partimos en una historia que está llena de humor negro, y que está mucho más cerca de la realidad de lo que parece.
El elenco de Three Billboards se compone de Frances McDormand, Woody Harrelson, Sam Rockwell, Peter Dinklage, entre otros. Dinklage, aunque el tráiler también vende al actor como una de las estrellas principales del elenco, solo sale como unos 15 minutos del filme (que dura 1 hora y 55 minutos), así que este no debe ser su razón para ver este filme. Aún con su poca participación, el personaje de Dinklage tiene su momento de brillar, especialmente en una escena que toma lugar en un restaurante, donde la incomodidad es palpable.
Harrelson hace un gran trabajo como el Sheriff Bill Willoughby. El actor no solo puede sacar carcajadas, pero también es el responsable del momento más emotivo del filme. Aún así, el show se lo roba Sam Rockwell, como el oficial Jason Dixon, y, por supuesto, Frances McDormand. McDormand es una actriz de siete pares, y, en mi opinión, da el mejor, o uno de los mejores, performances del año. Con solo su mirada, McDormand puede contarnos lo cansada, y claramente, deprimida que está Angela. Contrario al teatro, el cine tiene elementos que pueden acercarnos a la cara y a los ojos de los actores, y McDormand está consciente de ello. Me sorprendería si la actriz no recibe al menos una nominación en la temporada de premios que está por venir.
El guión de McDonagh es uno de los más graciosos del año (aunque es obvio que el cineasta tiene un humor bastante oscuro). Aún así, creo que hay momentos en el que se concentran tanto en un aspecto de la historia y se olvidan de algunos personajes (por ejemplo, hay una sección en la mitad del filme en el que el personaje de Angela, nuestra protagonista, es olvidado como por 5 o 6 minutos). Otra cosa que me molestó es que siento que hay momentos en el que el guión se desvía del tema de la conversación que están teniendo los personajes solo por tirarse una broma. (Quizás no lo hace tanto, o quizás solo yo lo siento así pero…)
La mayoría de los tiros de Three Billboards están plagados de banderas américanas y en la cinematografía abundan el rojo y el azul de la misma. Quizás McDonagh está tratando de hacer un comentario social, sobre la situación disfuncional de muchas familias, sobre el racismo, homofóbia, la salud mental, y la violencia que cunde a la nación norteamericana. La historia toma lugar en el presente, y aún así hay pueblos, y personajes en el filme (así como personas en la vida real), que creen que el sur “era mejor antes”. Por más exagerado que lo muestre McDonagh con Three Billboards, es algo que aún pasa, y, lamentablemente, seguirá pasando por un buen tiempo.
Three Billboards es una película entretenida a un nivel superficial, y preocupante en un nivel más profundo (hey, quizás soy yo sobreanalizando las cosas). Frances McDormand sigue siendo una maravilla en el cine norteamericano, y es un deleite verla en la pantalla. Si algo Three Billboards me dejó con ganas de visitar la filmografía de McDonagh ya que no he visto ninguna de sus otras películas. Pero también me dejó con ganas de ver más filmes con una protagonista femenina con una actitud bien “f*ck you” como McDormand en esta película. Es claro que faltan más mujeres así en el cine. O más mujeres, overall.
Vivo en el cine.
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