El Mobile World Congress está llegando a su fin, y sin duda alguna, los nuevos Galaxy S7 y Galaxy S7 edge fueron de los equipos que más llamaron la atención. Como dije en el artículo original, si bien es cierto que por fuera lucen muy similares a la actual línea del Galaxy S6, por dentro son toda una revolución. Gran parte de esto se debe al sistema de refrigeración que lleva en su interior conocido como Liquid Cooling System y que hoy vemos con más lujo de detalles.
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El Galaxy S7 es uno de los equipos más rápidos y poderosos en el mercado. Adicional a esto cuenta con un enfoque especial para los hardcore gamers, por lo que el fabricante ha querido asegurarse de que el terminal esté siempre en óptimas condiciones para cuando se está consumiendo mucha potencia y parte de esto requiere mantenerlo en una temperatura adecuada en todo momento.
Según nos adelantara la propia Samsung, se trata de un sistema de pequeñas tuberías o “thermal spreader” que condensan el agua y la evaporan para poder enfriar el teléfono con mayor rapidez que antes. Equipos de sobremesa de alta potencia como los que se usan especialmente para gaming, cuentan con un sistema de refrigeración también, solo que mucho más grandes. Obvio. Con este sistema, el CPU y el GPU podrán mantenerse a una temperatura más fría y mantener el rendimiento por largos periodos de juego.
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Founder & Commander-in-Chiief de QiiBO.com. Tras más de una década como publicista decidí seguir mi propio camino profesional. Ahora sigo el consejo de un genio, hago el trabajo que me gusta.
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