El 2015 definitivamente ha sido el año en taquilla de Universal Pictures con recaudaciones multimillonarias, tanto en Estados Unidos como mundial. Uno de estos éxitos fue Furious 7, que recaudó sobre los mil millones a nivel global. La franquicia no tiene signos de que vaya a rebajar la velocidad (get it?), y ya el estudio tiene a Chris Morgan escribiendo el guion de Furious 8 con fecha de estreno para el 2017. El problema ha sido encontrar quien la dirija.
En un interesante artículo, THR explica las dificultades que ha encontrado Universal para conseguir quien continúe las aventuras del grupo y sorprendentemente mencionando a VIn Diesel como una de las razones para ello.
Aunque el contrato de James Wan con Universal lo obliga a dirigir la 7ta y 8va, el chico les había pedido tiempo para trabajar en The Conjuring 2 con Warner Brothers. Ellos aceptaron después del inmenso trabajo físico y emocional que fue lograr Furious 7 a pesar de la trágica perdida de Paul Walker. El problema fue que cuando consultaron con Justin Lin, quien revivió la franquicia de la 3 a las 6, el prefirió irse con Star Trek Beyond. Universal, allegadamente, regresaron donde Wan con lo que una fuente de THR llamó “una oferta económica capaz de cambiarle la vida”, que de todos modos el director de 38 años rechazó.
¿Cuál fue el problema? Según el artículo, la producción de Furious 7 le causó tantos problemas que incluso afectó su salud. No solo por la triste situación con Walker, que lo hizo buscar cuanto truco de cámara, CGI, dobles (los hermanos de Walker), fue posible para mantener el filme, sino porque fuentes dicen que Vin Diesel estuvo “extraordinariamente difícil” de trabajar. Como productor, el actor supuestamente cuestionaba pequeños detalles en secuencias de acción, detenía la producción, y hasta procuraba sesiones nocturnas con la producción para afinar dialogo de su personaje.
Hay que mencionar que todas las piezas mencionadas le negaron esa información a THR: el representante de Diesel dijo que las alegaciones eran “completamente sin sentido”, el de Wan negó que hubiera habido más problemas aparte de la situación de Paul Walker, y el productor Neal Moritz le dijo a THR que “Obviamente, si había algún problema, no estaríamos haciendo la octava [película] con Diesel en este momento“. Por su parte, un comunicado oficial de Universal añade que “al estudio y a los cineastas les encantó trabajar con James en Furious 7, pero él nunca estuvo en la mezcla para una octava película debido a un conflicto de programación con The Conjuring 2. Estamos buscando activamente el director adecuado para el próximo capítulo de la franquicia”.
Obviamente Universal encontrará quien dirija Furious 8; el reporte dice que han estado mirando opciones tanto veteranos como novatos, incluyendo Jaume Collet-Serra (Non-Stop) entre otros. El portal menciona que algunos ejecutivos del estudio temen que Vin Disesel quiera dirigir el mismo eventualmente pero, otras fuentes dicen que a él no le interesa ese aspecto.
James Wan (SAW, The Conjuring) nos enseñó a no pensar que directores de acción son los únicos que puedan dirigir acción, por lo que sería interesante ver que otros creativos pudieran ser capaces. Estamos en una extraña era de directores buscando expandir sus horizontes; Roland Emerich hizo Stonewall (aunque las reacciones han sido abismales), Michael Bay tiene un filme sobre Benghazi en camino, y Adam McKay estrena The Big Short en noviembre sobre la caída económica del 2008. Me intrigaría ver que un director dramático como Kathryn Bigelow o Ava DuVernay, de ciencia ficción como Lana y Andy Wachowsky, o J.J. Abrams, o comedia como el mismo Adam McKay o, ¿Por qué no? Edgard Wright, le pondrían a la franquicia.
Lo que sí es seguro es que esta saga es de suma importancia para Universal por lo que definitivamente tendremos noticias pronto de quien aceptará sentarse como director.
¿Qué piensan ustedes?
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Podcastero, comediante, crítico de cine y TV miembro de la Critics Choice Association, crítico certificado en Rotten Tomatoes, y padre de gatos. Una vez cuando niño entré a un cine, y en cierta forma nunca salí.
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