¡Por fin! Después de meses y meses, vídeos, posters y mucho hype, llegó la tercera temporada de Game Of Thrones. Esta nueva temporada es basada en el tercer libro de la serie de George R.R. Martin, “A Storm of Swords” y es reconocido por muchos (incluyéndome) como el mejor hasta el momento. De hecho, ya dijeron que, para hacerle justicia, estaría más o menos dividido entre esta y la cuarta temporada.
Este episodio se titula “Valar Dohaeris” que en el antiguo idioma de Valyria significa “Todos los hombres deben servir” y es la contestación a “Valar Morghulis” (Todos los hombres deben morir) el cual era el título del capítulo final de la temporada pasada. Tyrion exige respeto, Margaery trae compasión –y escote- a King’s Landing y Jon Snow mete par de mentiras para ganar confianza.
Resumen Game of Thrones: Valar Dohaeris — episodio 3.1
¿Se fijaron que en los nuevos créditos de entrada, Winterfell está en ruinas y humeando? Buen toque HBO, buen toque. Comenzamos en frío (como se llama a una escena antes de los créditos), justo donde se acabó la anterior. Solo que en pantalla negra escuchamos gritos y espadas cayendo (ahorrando presupuesto) por el ataque de los White Walker a los Night’s Watch. Luego vemos a Samwell Tarly corriendo como ya-ustedes-saben-qué. Encuentra un cuerpo arrodillado pero sin cabeza…bueno, sin cabeza en los hombros porque la tiene en las manos. De momento, lo ataca uno de los “Wights” y justo cuando parece que se acabó su historia, lo salva nada menos que Ghost, el direwolf de Jon Snow, que lo defiende hasta que la criatura se prende en fuego gracias al Comandante Mormont que aparece junto a los que sobrevivieron el ataque de los Walkers. Mormont le pregunta a Tarly si envió los cuervos a lo que Sam le dice que no le grita “¡Ese era tu único trabajo!”. —Disculpe Lord, Sam es un tipo con obesidad mórbida corriendo de un zombi que por poco se lo come. ¿Cómo se le pudo olvidar enviar un dichoso pájaro?—.
Seguimos más allá de la muralla pero esta vez con Jon Snow, que por fin llega al campamento de los Wildlings donde conocerá al famoso Mance Rayder, que ha logrado la imposible tarea de unir a toda la gente libre. Lo primero que Jon descubre es que los cuentos de los gigantes no son cuentos. La criatura de unos 10 o 12 pies le pasa por el frente mientras construye su propia caseta e Ygritte le aconseja que no lo mire mucho porque son tímidos, después se molestan y cuando se molestan pueden enterrar un hombre en el suelo como un martillo entierra un clavo. —¡Wow!, no quiero saber lo que hacen cuando están horny—. Jon recibe mucho cariño de los salvajes y por cariño, quiero decir insultos y piedras por tener puesta la capa negra de un “cuervo” (Night’s Watch). Jon llega hasta la caseta de Mance Rayder pero lo primero que hace es meter la pata al confundir a un Wildling de pelo y barba roja con Mance Rayder. El verdadero Rayder le pregunta por qué abandonó la orden. La primera respuesta de Jon, “porque quiero ser libre”, no lo convenció (por supuesto, fue una respuesta estúpida) pero entonces, Jon se saca de la manga la vez que vio a Craster dejando su hijo recién nacido en el bosque para que se lo llevara un White Walker y su decepción al enterarse que el Comandante Mormount ya lo sabía. Aparentemente, esa contestación fue suficiente para Mance… por ahora.
Y tiempo. Esta vez pasaron 12:44 minutos antes de que en Game of Thrones enseñaran la primera mujer desnuda lo cual no me molesta por supuesto, no sería HBO ¿verdad? Anyway, Bronn está compartiendo con una “dama de compañía” cuando Podrick, el escudero de Tyrion, le avisa que este lo necesita.
Por su parte, Tyrion recibe la visita de su querida hermana, la reina Cersei, quien quiere saber para qué él va a hablar con su padre. La relación entre estos dos no ha mejorado nada pero eso es lo que pasa cuando envías a alguien a matar a traición ¿verdad Cersei? Tyrion no puede probar que fue ella quien ordenó a Mandon Moore el atentado durante la batalla de Blackwater Bay pero es obvio para él. Por cierto, quedó chévere la referencia a los libros cuando Cersei menciona que le habían dicho que Tyrion perdió su nariz (como sucede en el libro). La conversación entre Cersei y Tyrion termina casi como dos nenes chiquitos”
Cersei: “eres un tipo listo. Pero no eres ni la mitad de listo que crees que eres”
Tyrion: “pero soy más listo que tú”
¡Rayos!, niños, compórtense.
Luego, Bronn acompaña a Tyrion mientras le deja saber que su precio es más alto que antes ya que ahora es un Caballero ordenado.
La escena cambia y vemos a un hombre solo en una isla. Resulta ser Davos Seaworth, el leal y noble caballero de Stannis Baratheon que parecía haber muerto cuando explotó el “wildfire” en la batalla de Blackwater. Por suerte, una nave lo encuentra y resulta ser la de su amigo pirata, Salladhor Saan, quien no tiene ningún interés en continuar en la guerra y mucho menos regresar a Dragonstone, donde el Rey Stannis está “lamiendo sus heridas” como le dice el pirata. Davos se ve bien mal y acabado, eso es lo que la dieta de la isla desierta logra hacer, pero insiste en volver donde su rey para salvarlo de Melisandre quien se ha dedicado a hacer BBQ en la playa… con los soldados y Lords que se niegan a aceptar su dios de la luz.
Cuando Davos por fin regresa donde Stannis, quien parece estar 10 años más viejo, este le da una gran bienvenida: “Me dijeron que estabas muerto”. (¡Wow! Gracias por tanto amor, Stannis, yo también me alegro de verlo). Melisandre le saca en cara a Davos que por haber convencido al Rey de dejarla en Dragonstone, ella no pudo ayudarlos en la batalla de Blackwater y que esa derrota es su culpa. Davos intenta matarla pero no lo logra y Stannis lo envía a la prisión.
Robb Stark llega con sus principales seguidores, Roose Bolton y Lord Karstark, a Harrenhal (donde estaban Tywin Lannister, Arya y Jaquen H’ghar la Temporada pasada) pero, aparentemente ha sido abandonada —o hubo una batalla, eso no lo dejaron muy claro— cuando entran, descubren que hay más de 200 de sus hombres asesinados y dejados ahí. Robb, ordena que consigan algún lugar donde dejar a su madre Catelyn encerrada ya que aún hay mucha tensión por ella haber dejado ir a Jaime Lannister (eso va a ser una cena de Thanksgiving bastante incomoda). También encuentran que todavía queda uno vivo, un ex-Maester que se llama Qyburn.
Tyrion está sentado esperando que su padre Tywin Lannister – la mano del rey – termine de escribir una carta que, no les voy a revelar nada, pero recuerden este momento más adelante en la temporada, posiblemente al final. Tyrion quiere saber cuál será su premio por haber salvado la ciudad del ataque de Stannis ya que lo que ha recibido desde entonces es haber sido tirado a una pequeña celda en la cual ni siquiera lo visitó para ver si estaba bien. “Grand Master Pycelle me aseguro que tus heridas no eran de gravedad” le contesta Tywin demostrando que no le interesa ganar el premio a “mejor padre del año”. ¿Qué quiere Tyrion? Su derecho por nacimiento; ya que Jaime Lannister es parte de la guardia real, por ley no puede tener tierras ni títulos por lo cual se supone que Tyrion sea el próximo Lord de Casterly Rock.
Tywin le asegura que tendrá su recompensa por su parte en salvar la ciudad y eventualmente alguna posición digna del nombre Lannister y una esposa. Pero Tywin prefiere que los gusanos se lo coman vivo antes que Tyrion sea el Lord de Casterly Rock. “¿Por qué?” pregunta Tyrion y su amoroso padre le contesta que mucho ha hecho con tener que verlo caminar con el sigilo del León de Lannister ya que no puede probar que realmente no sea su hijo y por haber matado a su madre al nacer. Oooouch! Definitivamente no hay amor entre estos dos. Tywin deja ir a Tyrion con una advertencia: “la próxima prostituta que encuentre en tu cama la mando a ahorcar”.
Sansa, finalmente libre de su matrimonio con Joffrey, está jugando con su dama de servicio Shae a inventar historias de las naves que salen de King’s Landing. A Shae no le interesa jugar a inventar cuando prefiere la verdad pero Sansa le contesta: “La verdad siempre es horrible o aburrida” (¡quiero una camisa con esa frase!). Lord Petyr Baelish las visita y le asegura a Sansa que pronto la sacará de la capital como le prometió, pero debe esperar al momento apropiado y estar lista siempre. Mientras tanto, Ros, quien ahora es la asistente de Petyr, reconoce a Shae como otra ex-prostituta (¿será que tienen un saludo secreto o algún olor especial?) y le pide que esté pendiente de Sansa…especialmente cuando este con Baelish (recuerden, Ros es de Winterfell).
Finalmente llegamos a la parte que más yo esperaba: Daenerys Stormborn junto a sus dragones, Jorah y sus Dothraki en una nave que se dirige a Astapor. Los dragones están más grande, aunque no tanto como ella y nosotros quisiéramos. Estos cazan por si solos y cocinan sus presas con su propio fuego (¡eso debe ser conveniente! ¿alguien quiere carne frita? Abro la boca le tiro fuego y ya está). Dany se dirige a la ciudad de Astapor para comprar su ejército de los “Unsullied”, quienes han sido criados y capados para ser soldados desde su nacimiento. A Dany no le hace gracia tener un ejército de esclavos, después de todo, ella misma fue vendida como esclava. Claro, eventualmente le gustó cabalgar a Khal Drogo pero como quiera. Jorah le explica que la única forma de que los otros Dothrakis la sigan es demostrando fuerza y poder.
De regreso en King’s Landing, Joffrey está de vuelta en el castillo, metido en una especie de caja, siendo transportado por soldados para su protección, una camilla cubierta por completo. Lo sigue su prometida, Margaery Tyrell en otra de esas camillas pero entonces se detiene justo cuando están en el medio de “flea Bottom” el lugar más pobre y sucio de la ciudad, el sitio donde la temporada pasada los atacaron y Sansa pasó tremendo susto hasta que la salvó el Hound. Margaery sorprende a todos caminando por encima de basura y desperdicios humanos para meterse a un orfanato donde regala juguetes a los niños y los felicita por ser hijos de soldados caídos en la defensa de su ciudad.
Más tarde, Joffrey, Margaery, Ser Loras y Cersei se reúnen para comer donde hablan del evento y Joffrey, quien ahora tiene que hacerse el más bueno ante Margaery, la felicita por su “trabajo caritativo”… huevón. Cersei no deja pasar la oportunidad para usar su súper poder de ser pasivo-agresiva al preguntarle a Margaery –en su traje sin mangas y escote- si tenía frío. Margaery se hace la que no entendió y halaga el de ella mientras Joffrey —brutito que es— le pregunta a Margaery si quería un chal. Obviamente no entendió el sarcasmo de su madre (gran sorpresa). Cersei sabe muy bien que su condición de Reina a cargo se acabará cuando Joffrey llegue a la adultez, y ver como esta muchachita le quita la atención de su hijo no le hace nada de gracia. Tampoco ayuda que Joffrey diga que su madre cada vez es más dramática mientras se va haciendo más vieja. Margaery y Loras se dan una mirada a lo “estos tiene issues graves”.
De regreso en Astapor con Dany, conversa con Kraznys mo Nakloz, un esclavista, a través de una traductora ya que este habla el viejo idioma de Valerya. Kraznyz le explica a Khaleesi que los “Unsullied” son criados para ser soldados desde que tienen cinco años. Solo uno de cuatro sobreviven el entrenamiento y la prueba final que tiene que pasar es matar el hijo recién nacido de una esclava. Como si eso no fuera suficientemente horrible, le pagan al dueño de la esclava, no la madre. Kraznys también demuestra cómo sus soldados no sienten ningún dolor cuando le corta el pezón a uno de ellos para que este le conteste: “me alegro de haberle servido”. Si, leyeron bien. Después de todo, Kraznys dice que los hombres no necesitan pezón. Es obvio el asco que esto le produce a Dany pero lo logra disimular y le pide tiempo al esclavista para pensarlo. Míralo de esta forma, Dany, si algún día necesitas un pezón, tendrás muchos de donde escoger. Mientras conversa con Jorah, van caminando por los muelles y Dany comienza a jugar con una niña que le entrega una bola. Pero cuando la va a abrir, una figura misteriosa le tumba la pelota. Cuando Dany mira la bola en el piso, sale un horrible escorpión que parece estar hecho de esmeralda y pesadillas. El mismo tipo misterioso mata el escorpión y persigue la “niña” que resulta ser una de los hechiceros que Dany quemó en la temporada pasada. —Que changos esos hechiceros, como si morir quemado por fuego de dragón sea algo para guardar rencor—.
El misterioso hombre se quita su capa y descubrimos que es el gran Barristan Selmy, el anterior comandante de la guardia real que Joffrey despidió en la primera temporada por ser muy viejo. Selmy le explica a Dany que fue guardia del Rey Robert, pero él había jurado proteger a los Targaryen. Así que después de la muerte de Robert y el desplante Joffrey, decidió buscar a la última Targaryen para ser parte de su guardia real. Ahora Khalessi tiene al mejor guerrero en Westeros bajo su mando y el episodio termina con Barristan arrodillado frente a Dany jurando su servicio para siempre.
No Arya, Gendry, Hot Pie, Theon ni Bran, Rickon ni Osha. Esta historia tiene tantos personajes y tantas cosas pasando al mismo tiempo que estoy seguro que una vez más tendremos capítulos donde no veremos a algunos personajes. De todos modos, fue tremendo comienzo para esta nueva temporada; les dejo saber que ya leí el libro en el que se basa y entre una que otra cosa que dijeron o presentaron, me parece que va a ser bien explosiva, parapelos y tumba quijadas.
QiiBOnautas, ¿qué les pareció a ustedes Valar Dohaeris y el comienzo de la tercera temporada de Game of Thrones?
Podcastero, comediante, crítico de cine y TV miembro de la Critics Choice Association, crítico certificado en Rotten Tomatoes, y padre de gatos. Una vez cuando niño entré a un cine, y en cierta forma nunca salí.
2 Comments
Me ha encantado mucho esta
serie, con todo y que no es de mis géneros favoritos creo que está muy bien
hecha, la trama está bien desarrollada y con un buen ritmo. <a href=”http://www.hbomax.tv/game-of-thrones-3/”>Game
of Thrones 3</a> actualmente la podemos ver en la programación
de HBO así que se las recomiendo mucho. Está genial.